El nuevo testamento según Manny parte II

El nuevo testamento según Manny parte II

Predicación de Juan el Bautista

(Mr. 1.1-8; Lc. 3.1-9, 15-17; Jn. 1.19-28)

Manny 3

1 En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea

2 Y diciendo: ¡Lleve Lleve! Por que el reino de los cielos se ha acercado le traigo una oferta. ¿Qué digo oferta? Una ¡Super oferta! Damita, caballero…

3 Pues éste es aquel de quien habló el Profe. Isaías, cuando, por borracho, dijo

Voz del que pregona en el desierto:

Preparad los dineros del señor,

Compradle su fayuca.

4 Y cómo no comprar, Juan estaba vestido de pelo de xoloscuincle, tenía un cinto de cuero alrededor de sus lomos, como cargador de la merced; y su comida eran chapulines y aguamiel.

5 Y salía a él, cuanta marchanta hubiera en el tianguis de Jerusalén, y toda Judea, y toda la provincia de alrededor del Jordán

6 Y eran atendidos por él, ahí, a medi plaza

7 Al ver que muchos “amigos de lo ajeno” y policías venían a comprar sus productos, les decía con un sonsonete muy “acá”: ¡Órale, hijos de la generación de víboras! ¡Quién les dijo que había pa’ gente indecente! ¡Sáquensen!

8 Siguió: ¡Váyganse a comprar a otro puesto!

9 Y no piensen que tendremos al “Temo” como padre; porque yo les digo que Hugo puede levantar hijos al “Temo”

10 Y traigo machete pal’ que se ponga, tocadiscos ¿Noooo?

11 En ese tiempo, los merolicos fungían como bautizadores, públicos y eran, casi tan importantes, como los vendedores ambulantes de hoy en día.

El Bautismo de Jesús

(Mr. 1.9-11; Lc. 3.21-22)

13 Entonces, Jesús vino de Galilea a Juan al Jordán, para ser bautizado por el. Con polvo pica pica o alguna de las ocurrencias de Juan

14 Mas Juan se oponía diciendo: Yo necesito se bautizado por ti, yo necesito banda, ¿Y tu vienes a mí?

15 Pero jesús le respondió: Pero recuerda… nadie es perfecto y tú lo verás…

16 Y Jesús, después que fue bautizado, se le subió luego el agua miel de Juan; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio el espíritu de Bob Marley que descendía como una gaviota que venía por él y le dio un paseo en su espalda con plumaje negro.

17 Hubo una voz en los cielos que decía, agárrate duro carnal, que vamos pa’ Guasave, Sinaloa.

Tentación de Jesús

(Mr, 1.12+13; Lc. 4.1-13)

Manny 4

1 Entonces Jesús fue llevado por el espíritu al desierto, para ser tentado, por el chamoy, el diablo.

2 Y después de haber ayunado por cuarenta días y 39 noches (así son los planes vacacionales), tuvo hambre.

3 Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en nenepil.

4 Él respondió y dijo: Escrito está: No sólo de nenepil vivirá el hombre, sino de las Coca Colas.

5 Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad de la esperanza, y le puso sobre el pináculo de catedral

6 Y le dijo: si eres hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está:

A sus ángeles mandará acerca de ti,

y, en sus manos te sostendrán,

para que no tropieces con tu pie en piedra.

7 Escrito esta también, en el código penal: No tentarás a los señores y menops a tu señor.

8 Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, esta vez cobrando el doble del taximetro, ques’que por la hora, y lo puso en un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos

9 Y le dijo: Todo esto te daré, si un besito tu me das.

10 Entonces Jesús le dijo: Vete, maricón, porque escrito está: Al señor no se las pedirás y sólo como hombre servirás.

11El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.

Jesús principia su misterio

12 Cuando Jesús oyó que Juan, estaba en los separos, volvió a Galilea;

13 Y dejando a Nazaret, vino y habitó en Capernaum, ciudad marítima, con excelentes servicios turísticos, en la región de Zabulón y Neftalí

14 Para que sumpliese lo dicho por el Profeta Manzanero cuando dijo:

15 Esta tarde vi llover

Vi gente correr

16 y no estabas tu

17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar y a decir: ¡Lleve Lleve! Por que el reino de los cielos se ha acercado le traigo una oferta. ¿Qué digo oferta? Una ¡Súper oferta! Damita, caballero…

18 Andando Jesús junto al mar de Galilea, se le antojó un cebiche de pescado, cuando vio a dos hermanos, Simon, llamado Pedro (Le decían Pedro por como se ponía cuando tomaba sotol), y Andrés su hermano, llamado Andrés (¿Qué esperaban?), que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.

19 Y les dijo: Venis en pos de mí, yo os haré famosos… digo, pescadores de hombres.

20 Ellos entonces, dejando al instante las redes siguieron al barbón que hablaba chistoso.

21 Pasando de allí, vio a otros dos hermanos, Jacobo hijote de Zebedeo (Alias: Cebadeo, por como bebía cerveza), y Juan su hermano, en la barca con Zebedeo su padre, que remendaban sus calzones; y los llamó.

22 Y ellos, dejando al instante la barca y a su remendón padre, le siguieron.

23 Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las Pedagogas (cantinas para judíos) su truco más afamado; sacar un sombrero de un conejo.

24 Y se difundió su fama por toda Siria; y le trajeron todos los que tenían dolencias, los afligidos por diversas enfermedades, los que cargaban con el stress de la oficina, los endemoniados, lunáticos y paralíticos; y los sanó con chistes de Pepito

25 Y le siguió mucha gente de Glilea, de Decápolis, de Jerusalén, de Judea, Iztapalapa, ciudad Nezahualcoyotl y del otro lado del Jordán.

El sermón del monte: Las bienaventuranzas

(Lc. 6.20-23)

1 Viendo el público, subió al monte; y devorándose una serpiente parado en un nopal, vinieron a él sus disípulos.

2 Y hablando con la boca llena les enseñaba, diciendo:

3 Bienaventurados los pobres, porque de ellos es la parte inferior de los puentes.

4 Bienaventurados los que lloran, porque, asi´harán menos pipi.

5 Bienaventurados los que son bueyes, porque hasta la yunta lamen.

6 Bienaventurados los que tienen hambre, porque traje sándwiches que me María, mami.

7 Bienaventurados los ociosos, porque se entretienen solos.

8 Bienaventurados los que no son velludos, por que no se les hacen pelusas en el ombligo.

9 Bienaventurados los burócratas, que no tiene que trabajar

10 Bienaventurados los narcotraficantes, porque en sus manos está la economía nacional

11 Bienaventurados son los que saben alburear, porque se sabrán defender en la calle

12 Gozad y alegraos, porque, esta noche, los tragos los pongo yo que, del cielo, me han caido unas luces.

Jesús y ira

(Lc. 12.57-59

21 Oísteis que fue dicho a los antiguos(Nada personal, Isshat): No matarás; y cualquiera que matare será culpable

22 Pero yo os digo que cualquiera que se encabrone contra alguien tendrá su motivo; y cualquiera que le diga: Hijo de _________(coloque su insulto en la línea) , será culpable y tendrá que atenerse a las consecuencias

Jesús y el adulterio

1Oísteis que fue dicho a los antiguos: no cometerás adulterio.

2 Pero yo os digo que las viejas de antes no estaban tan bien hechas como las de ahora. El barro de antes no solidificaba tan bien.

3 Por tanto, si tu ojo derecho te es de ocasión de caer, asómalo por la ventana a ver que taco de ojo te das.

4 Y si tu mano derecha te es ocasión de sacudir, lávala, caliéntala, y échala en ti; pues es mejor pájaro en mano que siento volando (de aquí que historiadores piensan que Jesús era diestro)

Jesús y el divorcio

1 También fue dicho: cualquiera que repudie a su mujer, déle carta de divorcio.

2 Pero yo os digo que conozco a centenares de maridos que volverían felices al hogar si no hubiera una esposa que les esperara. Quiten a las esposas del matrimonio y no habrá ningún divorcio

3 Sabed que el matrimonio es la principal causa del divorcio

Jesús sana a un leproso

(Mr. 1.40-45; Lc 5.12-16)

Manny 5

1 Cuando descendió Jesús del monte, le seguía mucha gente.

2 Y he aquí vino un leproso y se postró ante él, diciendo: Doc, si quiere, puede atenderme.

3 Jesús extendió la mano y le tomó el pulso mientras escuchaba el corazón del enfermo con su estetoscopio que le había regalado Novartis y dijo: Diga treinta y tres

4 Entonces Jesús le dijo; Mira, no le digas a nadie, tengo estas muestras médicas que te salen más baratas que el original. Toma dos al día durante una semana y me vuelves a ver.

Y hasta aquí le dejamos con la historia de Jesús, María y José.